Leprechaun: La noche del duende
( Leprechaun )
Hay que tener mucha suerte
para encontrar un caldero
que esté lleno de dinero
y no te lleve a la muerte.
Pero es de santo en la frente
dar ser actriz por acabado
tras este infierno haber grabado
y encontrarte con Friends de repente.
El personaje más pijo de sofá neoyorkino
estuvo apunto de abandonar la actuación
por culpa de este enano muy cabrón.
Algo que a esta película vino divino.
El personaje y la actriz
maduran durante la trama
y es que la dificultad emana
que el éxito es un desliz.
Y, si ver a la pezonera amiga,
te parecía flojo aliciente,
prepara bien a tu mente
pues Willow es el demente.
Eso si que tiene miga.
Pensar que bajo la careta
está el diminuto pek
toda tu infancia la veta
más que el origen del bistec.
Un slasher descuidado
para una tarde aburrida.
El guion va perdiendo grado
y el absurdo se avecina.
Exagerados sonidos de puñetazo
y un enano disfrazado,
que es ventrílocuo animado
sin salir de la espalda brazo.